Heme Aqui

 Isaías 6:8 "Entonces oí la voz del Señor que decía: ¿A quién enviaré? ¿Quién irá por nosotros? Y respondí: Aquí estoy. ¡Envíame a mí!" 

Muchos de nosotros cuando recibimos un llamado o pensamos que Dios nos puede llamar o utilizar, decimos, yo no puedo, yo no soy perfecto, Dios no me puede enviar a mí.

Dios no llama a perfectos, Dios no llama a maduros, Dios llama a gente disponible y gente que quiera comprometerse. A través de toda la biblia podemos ver como el Espíritu Santo ha llamado a lideres consagrados al reino.

Todo hombre y mujer son llamados por Dios Romanos 8:28 Ahora bien, "Sabemos que Dios dispone todas las cosas para el bien de quienes lo aman, los que han sido llamados de acuerdo con su propósito." 

Pero solo unos pocos responden, sin embargo el llamado que los lideres experimentaron es diferente y exhibe distintas modalidades. Muchos son llamados soberanamente Moises fue elegido por Dios, quien le hablo desde una zarza ardiente.

Exodo 3: 1-4 Un día en que Moisés estaba cuidando el rebaño de Jetro, su suegro, que era sacerdote de Madián, llevó las ovejas hasta el otro extremo del desierto y llegó a Horeb, la montaña de Dios.

Estando allí, el ángel del Señor se le apareció entre las llamas de una zarza ardiente. Moisés notó que la zarza estaba envuelta en llamas, pero que no se consumía, así que pensó: "¡Qué increíble! Voy a ver por qué no se consume la zarza."

Cuando el Señor vio que Moisés se acercaba a mirar, lo llamó desde la zarza: ¡Moisés, Moisés! Aquí me tienes respondió.

Cada vez que Dios ha llamado hacer su propósito o su voluntad, nuestra responsabilidad como hombres es de responder a ese llamado y a través de todas las escrituras, podemos ver un patrón, el hombre o la mujer de Dios contesto Señor HEME AQUÍ.

El niño Samuel fue llamado mientras dormía 1 Samuel 3 1-4  Samuel, que todavía era joven, servía al Señor bajo el cuidado de Elí. En esos tiempos no era común oír palabra del Señor, ni eran frecuentes las visiones.

Elí ya se estaba quedando ciego. Un día, mientras él descansaba en su habitación,  Samuel dormía en el santuario, donde se encontraba el arca de Dios. La lámpara de Dios todavía estaba encendida. El Señor llamó a Samuel, y éste respondió: Aquí estoy.

Escuchar y responder es vital en una relación con Dios. Aunque Dios no siempre usa el sonido de una voz humana, nos habla con igual claridad por medio de su palabra.

Para recibir mensajes, debemos estar listos a escuchar y actuar sobre lo que nos diga. Como Samuel esta listo para decir HEME AQUÍ, cuando Dios te llame para actuar. Otros son llamados por medio de los seres humanos. Samuel fue a David y le ungió con aceite 

1 Samuel 16: 10-13  "Isaí le presentó a siete de sus hijos, pero Samuel le dijo: El Señor no ha escogido a ninguno de ellos.¿Son éstos todos tus hijos? Queda el más pequeño respondió Isaí, pero está cuidando el rebaño. Manda a buscarlo insistió Samuel, que no podemos continuar hasta que él llegue. Isaí mandó a buscarlo, y se lo trajeron. Era buen mozo, trigueño y de buena presencia. El Señor le dijo a Samuel: Éste es; levántate y úngelo."

Samuel tomó el cuerno de aceite y ungió al joven en presencia de sus hermanos. Entonces el Espíritu del Señor vino con poder sobre David, y desde ese día estuvo con él.

Dios siempre nos llama a todos porque Dios nos dio un llamado, como vimos recién Dios llamo a Moisés de en medio de una zarza ardiente. Siempre Dios nos llama en medio de algo, unos estaban pastoreando ovejas, estudiando, en medio de una crisis, Dios nos llama en medio de nuestros problemas y cuando no tenemos esperanza, también si estas bien económicamente.

Estamos en algo cuando Dios nos llamó, primeramente tenemos que estar ocupados, Dios no llama a vagos, Dios llama a alguien que esta haciendo algo. Dios nos invita a su llamado, no nos obliga, no nos fuerza y como Moisés le contesto HEME AQUÍ.

A Moisés le tomo 40 años, llegar a esa palabra, para que Dios trabajara con su voluntad, para llegar a decir en ese momento  HEME AQUI.

¿Que tuvo que dejar Moisés en esos 40 años? Fue un niño hebreo, encontrado en un río y creció educado como Egipcio en la familia del faraón con destino de ser Príncipe y llegar a ser faraón.

El estaba en el medio de la esclavitud que padecía su pueblo, estando ahí y viendo como un egipcio golpea a un hebreo y su pasión de liberación, había una unción de liberación en él, que no aguanto y dijo yo no puedo tolerar esto.

Lo que a ti te enoja estas llamando a resolver y te preguntas, ¿quien va a restaurar a mi familia?, ¿quien ira a orar por esas persona que tiene cáncer?, ¿quien ira a salvar a esos jóvenes que caen en drogas?, quien ira a salvar a mi hermano, a mis hijos a mi esposa, quien ira a esos miles y miles que se acercan cada día mas al pozo del infierno. ¿Quién IRA?

En medio del problema, Dios te esta llamando, si sos joven dirás yo quiero disfrutar, como si la Iglesia sea aburrida, como que  disfrutar el pecado trae placer, pero al final es muerte.

Vale la pena servir a Dios, tiene recompensa, él nos guarda de muchos peligros, HEME AQUÍ Jesús HEME AQUÍ.

¿Cuándo Él te llame? ¿Qué dirás? HEME AQUÍ SEÑOR ENVÍAME A MI.

Dios te dice hoy, me has dado ofrendas, me has dado alabanza, pero hoy te quiero en el Altar. Rendí todo aquello que no te deja llegar, rendí todo aquello que el mundo no te deja. Hay muchos que no quieren dejar el mundo, la música mundana, no quieren ceder nada de nada,  Dios te dice rindete, rindete en el Altar.

Muchas veces decimos estamos en medio de algo, un negocio, un partido, ocupados, distraídos, Dios te dice !!!RESPONDE MI LLAMADO!!! CONTÉSTAME, CONTESTA MI LLAMADO.

En pocos días mas, tenemos otro llamado IGLESIA, otra oportunidad de contestar su llamado.

La INVASIÓN DEL AMOR DE Dios, aceptemos ese llamado, salgamos y llenemos nuestra Iglesia, ganemos este Barrio, ganemos esta nuestra ciudad para Cristo, y una vez mas reafirmemos que MAR DEL PLASTA ES CIUDAD DE Dios.

Podrá Dios contar con nosotros.

Podremos decir como Samuel HABLA JEHOVÁ PORQUE TU SIERVO OYE.

Y yo le digo a Dios hoy 

HÁBLAME JEHOVÁ PORQUE TU SIERVO OYE.

HEME AQUÍ SEÑOR ENVIAME A MI. 

Amén.

Así Como David Cantaba